Delegados de la Fundación Peruanitos viajaron a la ciudad andina de Cusco, que sirve de puerta de entrada a Machu Picchu, para llevar a cabo el cuarto proyecto de renovación realizado por la fundación. Los niños y las niñas rescatados por la policía de las calles de Cusco habían sido alojados en unas salas oscuras y húmedas de la carcel municipal en lo que las autoridades ubicaban a sus parientes. La Fundación Peruanitos hizo que se repararan las paredes humedecidas por filtraciones de agua y el desnivelamiento del piso, a la vez que se crearon habitaciones separadas para las niñas y los varones. Las habitaciones fueron pintadas y amuebladas con camas nuevas y televisores a color. Los niños jubilosamente estrenaron sus pijamas recion recibidas y se dispusieron a dormir en sus cómodas camas.
